Y las profecías a veces se cumplen. No nos queda más que dar las gracias a Lorenzo por estos vídeos. En ocasiones nos reímos, nos sabía malo que nos grabara, pero cuánto nos gusta ahora poder vernos de pequeños, de jóvenes, ver a nuestros seres queridos que han desaparecido. Las fotografías no guardan sus gestos, su forma de andar, su mirada.
Sabemos, que allá en la residencia te están contando todo esto, seguro que estás contento.
No hay comentarios:
Publicar un comentario